Barça y Manchester City, las obras maestras de Guardiola: ¿cuál fue mejor?

La Champions League completó el triplete del Manchester City, un equipo que ya da lugar a la comparación con el FC Barcelona de su mismo autor, Pep Guardiola.

El Manchester City elevó al cielo globos en forma de sus trofeos tras conseguir el triplete (treble). pic.twitter.com/TxABVCIhXD

— Daniel Navas V. (@DanielNavasV) June 25, 2023

Los pases de Kevin de Bruyne o Xavi Hernández, el regate corto y la magia de Andrés Iniesta o Bernardo Silva, los goles de Erling Haaland o los que dio un gran Samuel Eto’o, el equilibrio de Rodri o Busquets, un Leo Messi único e inimitable… Quizá sea uno de los pocos equipos dirigidos por Guardiola que se ha acercado a aquel nivel de excelencia. Su fútbol ha evolucionado y hay diferencias significativas entre ambos conjuntos, pero su dominio sobre el césped y en los resultados se ha hecho patente. Aquí comparamos las principales características de ambas creaciones del técnico de Santpedor.

Títulos de Pep Guardiola en Barcelona y Manchester City

El triplete del Manchester City lo conforman en esta temporada 2022-23 los títulos de Premier League, FA Cup y la Champions League tras vencer en la final al Inter de Milán. Mientras, el primer Barça de Pep de la campaña 2008-09 se impuso en LaLiga (entonces LaLiga BBVA), en la Copa del Rey y en la Liga de Campeones, con su famoso triunfo frente al United de Sir Alex Ferguson. No obstante, lo más grande que logró aquel conjunto azulgrana fue el famoso ‘sextete’. Es decir, que a los 3 títulos citados sumó los que jugaba gracias a haberlos ganado: Supercopa de Europa, Supercopa de España y el Mundial de Clubes. En definitiva, ganó todo lo que jugó. A este Manchester City le faltarían para llegar a ello la Community Shield (que jugará ante el Arsenal), la Supercopa de Europa (vs Sevilla) y un ‘Mundialito’ donde de momento están clasificados Club León, Urawa Red Diamonds, Al-Ahly, Auckland City y Al-Ittihad. Pero el legado de Pep no se limita a un único año bueno; sus equipos han dominado durante un largo tiempo. Con el FC Barcelona, Guardiola conquistó 14 títulos en 4 temporadas: 3 Ligas, 2 Copas del Rey, 3 Supercopas de España, 2 Champions League, 2 Supercopas de Europa y 2 Mundiales de Clubes. Son los mismos 14 que ha logrado en el Manchester City en 7 campañas: 5 Premier League, 4 EFL Cup, 2 FA Cup, 2 Community Shield y 1 Liga de Campeones.

Pep Guardiola: a punto de conseguir su segundo triplete con Manchester City

Estilo de juego 

El dominio de los equipos de Pep Guardiola siempre han tenido un denominador común: el balón. Su obsesión por mantener la posesión le ha hecho rey y también prisionero a veces de sí mismo, pero le ha dado muchas más glorias que decepciones. Tener la pelota no es solo un medio para atacar y marcar goles, también lo es para defender. La regla es sencilla: si el rival no la tiene, no marca. Y eso se ha cumplido en todo momento, ya fuese en Barcelona, en el Bayern de Múnich o en el Manchester City. Otro asunto elemental es la presión rápida tras pérdida. En el FC Barcelona, los más menudos como Xavi o Iniesta apretaban al máximo para recuperar el esférico y generar situaciones de peligro con el rival en despliegue. Jugadores como Yaya Touré (en su primer año en el Camp Nou) o después Seydou Keita fueron imprescindibles para esta esta tarea, incluso el lateral Dani Alves. Y en el Etihad hemos visto a Kevin de Bruyne hacer un despliegue físico envidiable, a Gündogan, Mahrez o Grealish morder… mismo concepto, distintos nombres. También ha sido común el jugador de base para equilibrar su juego. Hablamos del ‘5’, del Sergio Busquets que leía todos los ataques de sus rivales, robaba y después jugaba. El canterano ha sido el mejor de su posición en muchas décadas, quizá el mejor de la historia, porque no solo defendía: también era un generador de juego al nivel de Xavi e Iniesta. Y Rodrigo Hernández ejecuta este rol con perfección en el Manchester City. Con menos chispa, pero con la misma omnipresencia y con más llegada. Suyo fue el gol de la final ante el Inter. Pero más allá de esas líneas maestras, Pep Guardiola ha añadido nuevos esquemas a su manual en Mánchester. Del 4-3-3 o el 3-4-3 que empleó mayormente en Barcelona, en el Etihad ha creado un superequipo alrededor de una especie de 3-2-4-1. La finura técnica, como siempre, es imprescindible partiendo del portero Ederson y le siguen los centrales. Walker, lateral reconvertido, o Aké, central y lateral, con Rúben Dias fijo en el centro. John Stones avanzó al pivote junto a Rodri para hacer un doble mediocentro más compacto y liberar en una doble mediapunta a Ilkay Gündogan y Kevin de Bruyne, quienes se ven más libres para avanzar alrededor del área, moverse entre líneas y además ser la primera línea de presión. En los extremos, muy abiertos, Bernardo Silva y Jack Grealish, quien ha dado un paso adelante y fue clave en la final por esa amplitud. En el ‘9’, un extraterrestre como Erling Haaland que ha metido todo lo que le han generado, que es una cantidad brutal de ocasiones.

Jugadores destacados bajo el mando de Guardiola

Hemos mencionado a muchas de las estrellas de Pep. Podríamos recitarlas todas una a una, pero nos quedamos con algunas piezas clave que analizamos más en profundidad. Además, rescatamos sus estadísticas.

Leo Messi

Pep fue clave en el estallido de Messi, quien ganó 3 de sus Balones de Oro con el de Santpedor en el banquillo. Pasó de ser un extremo regateador más a un jugador total, mediapunta asistente y delantero matador como falso 9. Con Guardiola jugó un total de 219 partidos en los que marcó 211 goles y dio 78 asistencias. En el año del triplete hizo 38 tantos, entre ellos el 2-0 de la final de Champions, y repartió 15.

Xavi Hernández

Aunque fue Frank Rijkaard el que inició la revolución de Xavi, Guardiola maximizó la visión de juego extraordinaria del centrocampista de Terrassa. En la temporada 2008-09 siguió cerca del área y marcó 10 goles, pero es que además repartió 28 asistencias, el récord de su carrera, y de ellas 10 fueron para Leo Messi. En total, el campeón de Europa jugó 208 partidos a las órdenes de Pep, marcó 36 tantos y entregó 68 directamente a sus compañeros.

Sergio Busquets

El de Sabadell ya fue el ojo derecho de Guardiola en su año en el Barça B en Tercera División, y cuando subió al primer equipo se lo llevó de una. Y con razón, porque dio luz a uno de los mejores ‘5’ de la historia del fútbol. Xavi, Iniesta y Messi eran más libres gracias a Busquets, un ladrón especialista que además tenía la misma visión de juego que sus compañeros en la medular. Desde que subió con los ‘mayores’, 191 partidos con Pep. El año del triplete, 41 en total y solo 2 en el inicio de curso con el filial.

Kevin de Bruyne

El belga ha tenido roles distintos con Guardiola, pero la excelencia la ha alcanzado en este triplete. Su despliegue físico, presionando, recorriendo el campo y llegando también al área, se ha unido a que ha encontrado en Erling Haaland su socio ideal. De Bruyne ha dado 26 asistencias, su récord en el City y las mismas que dio en la 14-15 con el Wolfsburgo, y de ellas 11 han sido al delantero noruego.

Bernardo Silva

Pep ha empleado a Bernardo Silva como centrocampista, mediapunta, falso 9 y este año, especialmente como extremo. Sin ser un jugador veloz, ha desbordado y sorprendido siempre con su calidad en el regate y la asociación, dando amplitud cuando tocaba y rompiendo en diagonal para encontrar la portería. 7 goles y 6 asistencias parecen números normales o discretos, pero su aportación al juego del Manchester City es clave.

Ering Haaland

52 goles en 53 partidos. Qué vamos a decir. Ha roto el récord de dianas en una misma temporada tanto del Manchester City como de la Premier League, en la que ha hecho 36 en 35 encuentros. Haaland ha sido justo la pieza diferencial que necesitaba Guardiola, la que le faltaba desde la cuesta abajo del Kun Agüero. Y además, ha logrado encajar en el juego colectivo, algo que se ponía en duda al principio de temporada, pero ha acabado repartiendo 9 asistencias. Un fuera de serie que aspira al Balón de Oro.